Iglesia de San Nicolás al Carmen

Blasón

El Orden carmelitano se identifica con uno blasón a forma de escudo que generalmente  presenta:
al centro una montaña estilizada proyectada hacia el cielo: es el monte Carmelo, lugar de origen de la Orden;
arriba tres estrellas de oro, generalmente con seis puntas: probablemente representan a la Virgen María y a los profetas Elía y Eliseo, o tal vez a un fraile carmelitano que está yendo hacia la punta del monte Carmelo y otros dos que ya han acabado su recorrido de fe;
una corona con doce estrellas que representan a la Virgen María: es un recuerdo del Reino de los Cielos. Desde la corona sale el brazo del profeta Elía: el soldado de Dios que con su espada flameante protege la verdadera Fe.
El blasón carmelitano apareció por la primera vez en la cubierta de un libro con las historias de la vida de  San Alberto, en  1499.
Los colores blanco y negro o tané (un tipo de marrón) recuerdan los colores del hábito de los  Carmelitanos.
Los Carmelitanos descalzos, rama reformada de la Orden, añadieron una cruz encima de la montaña a partir del siglo XVII.