La Basílica de los Siervos de María
El Santuario Mariano
La orden de los Siervos de María fué desde un principio bien acogida por los seneses, seguramente porque proviene de Florencia gracias a la cercanía geográfica y sobretodo por el fuerte vínculo que siempre Siena ha tenido con la Virgen como demuestra la dedicación de la Catedral a la Virgen de la Asunción. Una de las reglas más importante de la Orden era la de dedicar cada iglesia a María con pocas eccepciones . En el caso senés la costrucción del edificio sacro en el lugar de la antigua iglesia de San Clemente permitía de no seguir la regla pero los frailes quisieron dedicarlo a María dejando el nombre de San Clemente a la parroquia adyacente. La relación entre Siena y la Orden Servita fué desde el principio muy intensa tanto que la primera obra expuesta en el altar mayor de la nueva iglesia fué la Virgen con el Niño llamada Virgen del Bordone del florentino Coppo de Marcovaldo, pintada durante su encarcelación en Siena después de la batalla de Monteaperti (1260). La iglesia de los Serviti fué considerada un santuario mariano de grande importancia en Siena, siendo el segundo templo después de la catedral, hasta el 1611 cuando fué construida la nueva Colegiata de Santa María en Provenzano. Después de la célebre batalla de Montaperti, Siena venció nuevamente a Florencia con las insignias de la Gloriosa Virgen en la batalla de Puerta Camolía . . .