Iglesia de San Nicolás al Carmen
Santa Teresita de Lisieux
ICILIO FEDERICO JONI (1866-1946) 1927
Al interior de la Capilla del Santísimo Sacramento, arriba del altar lateral, se encuentra una pintura en la cual está representada con el típico hábito de carmelitana descalza Santa Teresita de Lisieux, «la más grande Santa de los tiempos modernos» según el Papa Pio X. Rodeada por un grupo de ángeles, Teresita lleva en la mano izquierda la cruz, signo de su amor perfecto para Cristo y en la derecha un ramo de rosas, símbolo de las gracias que prometió dar a la humanidad “Después de mi muerte haré caer una lluvia de rosas. Quiero subir al cielo para hacer bien a la tierra. Nadie me invocará inútilmente”. En la predela, que se encuentra en la parte inferior de la pintura, se nota a la Santa en el momento en el cual pronuncia sus últimas palabras en su lecho de muerte mientras lleva la Cruz en el pecho: “Diós mio, os quiero!!”. Cuando murió, la tarde del 30 de septiembre de 1897, en su rostro se reflejó una expresión de felicidad y desde el cielo empezó caer la “lluvia de rosas” que ella había prometido, como anticipación de los milagros que habría realizado. Santa Teresita hizo su primer prodigio el 24 de junio de 1923 cuando una monja de Parma muy gravemente enferma le dirigió su oración, ésta recibió la gracia y fue curada. Por eso en 1927 fue proclamada santa y desde entonces, gracias a su . . .